Fui destinado al comienzo del curso 1974-1975 a las escuelas de la Sagrada Familia de Úbeda. El director de las escuelas en ese momento era el padre Trobat sj. En el internado me hice cargo del primer curso de automoción. El internado de ese primer curso lo componían unos ochenta alumnos, todos procedentes de los pueblos de Úbeda que, por no haber en sus respectivos pueblos en aquella época tanto instituto de enseñanza secundaria como escuelas de formación profesional, se veían obligados a vivir como mal menor en el internado de Úbeda.
Aún recuerdo el primer día de clase en el salón de actos durante la presentación la muerte de la madre de un alumno Juan Nuñez procedente de Paimgo (Huelva). Fue extraordinaria la labor que hizo con aquel chico la religiosa Maria Ruiz de Azua, como todas las religiosas Maria del Sagrario Gainza Ros, Juana Condal Cerezo, y Maria G. alvarez alvarez. Mi preocupación era que ese chico impresionado por haber perdido en un pueblo tan distante de su tierra a su madre no pudiese soportar la presión de aquellos recuerdos dolorosos, sin embargo al final de aquel curso 74-75 aquel chico nos enseñaba gozoso sus notas suficientes para superar lo que había sido un duro hito en su vida.
Entre los profesores que recuerdo del internado estaba don Isaac, don Pedro Pulido, Fernández-Jose Luis Latorre Bonachera, Eduardo Muñoz Fernandez, Gines Geal Bonel, Ana Maria ancin Zabalza , Daniela Cottereau Boudeville, , Juan Pedro Gómez Jimenez , Chema Arranz y Mariano Solís.
Recuerdo con gran cariño la figura del hermano Blas Aranda sj que con su entrañable personalidad me hacía recorrer casi todos los pueblos de la provincia de Jaen y algunas veces de Córdoba de donde procedían la mayoría de nuestros alumnos para asistir a las fiestas patronales y con ello convivir y conocer a sus familias. A través de estas visitas a los pueblos observé el enorme cariño con que acogían a este gran jesuita que era el hermano Blas.
Recuerdo también que aquel curso fue el año de la muerte de Franco y a lo largo del curso hubo numerosas huelgas por parte de los alumnos de magisterio y de maestría. De tal forma que con motivo de las vacaciones de navidad hubo un conato de rebelión en el internado. Al año siguiente el gobernador civil de Jaén mandaría cerrar durante un tiempo todas las instalaciones de la escuela de la SaFa por miedo a que fuera perturbado el orden público.
Entre estos recuerdos, también el enorme agobio y preocupación del padre José Trobat que tuvo que hablar familia por familia con cada uno de los padres que fueron expulsados al estar señalados como gentes promotores de la huelga.
Entre los alumnos recuerdo un numeroso grupo de Campillo de Arenas como Juan Aguilar Vega, ,Eduardo Arriaza Aguilar, Antonio Fernandez Matarin, ,Manuel Garcia Roman, Jose Garcia Sanchez, ,Antonio Gonzalez Molinero, Juan Carlos Gonzalez Vega, Juan Martinez Galian, Eleuterio Molina Muñoz Manuel Morales Vega, Miguel Rodelas Rayo, Juan Manuel Vazquez Roman Manuel Santos Sanchez y Jose Arcangel Titos Cegri era un grupo que indudablemente animaba los pasillos de aquel internado.
Otro grupo numeroso lo componian los de Begijar y entre ellos recuerdo a antonio Zaragoza Rentero, Marcos Prados Quesada, ,Antonio Perales Pulido, Jose Lopez Navarro, Francisco Escuderos Navarro, ,Antonio Beltran Marin.
De Sabiote, a donde ibamos de vez en cuando a visitar a las familias con el Hermano Blas, recuerdo a Antonio Gonzalez Sanchea Agustin Navarrete Torres, alumno que hizo las veces de Delegado de curso. De Canena otros alumnos como Manuel Quesada Garcia, Jose Godoy Reyes a Ildefonso Reyes Garcia
La ciudad desde un principio me cautivó. La plaza del Salvador y al final aquel mirador nocturno sobre sierra Magina, lo entrañable de sus gentes con todos los que componiamos el elenco educativo de las Escuelas SAFA , era de una familiaridad impresioante.
Otro hecho luctuoso que marcó a aquella promocion fue la muerte en accidente de trafico de su tutor formador Cristobal Alamo Clavijo.